Un emotivo homenaje a Ana Murugarren llena de emociones el salón de actos del Castillo de Marcilla
Este pasado sábado, el salón de actos se llenó de risas, aplausos y, sobre todo, emoción, para rendir un cálido homenaje a Ana Murugarren, la querida cineasta de la localidad. El evento, que reunió a amigos, familiares y vecinos, fue un reflejo de la alegría y el carácter natural que siempre ha caracterizado a Ana, una mujer que con su cine ha logrado conectar con tantas personas, sin olvidar nunca a su Marcilla natal.
El salón se colmó de recuerdos, anécdotas y, sobre todo, de mucho cariño hacia una de las grandes figuras del cine navarro. Durante la semana anterior, se proyectaron tres de sus películas logrando la admiración de muchos marcilleses que no habían tenido oportunidad de verlas.
Los asistentes, emocionados, celebraron no solo su trayectoria profesional, sino también su forma de ser: cercana, optimista y siempre dispuesta a aportar su visión única al mundo del cine. En su intervención, Ana mostró su agradecimiento, visiblemente conmovida, ante tanto afecto recibido. “Siempre he considerado que si, soy profeta en mi tierra, lo he sentido así y hoy, al ver todas estas caras conocidas, me doy cuenta de que lo mejor del cine es compartir momentos como este», comentó entre risas.